El objetivo de la clase es transmitir más que un idioma, una cultura. Conocer las tradiciones típicas, los modos de pensar y analizar, los hábitos culturales y la visión del mundo entre otras cosas, hace que la enseñanza del alemán sea no sólo una herramienta. Sin embargo, se espera que con este aprendizaje las alumnas rindan pruebas internacionales que acrediten su nivel, como el Deutschen Sprachdiplom der Kultusministerkonferenz – Zweite Stufe (DSD II).
Haber logrado el Sprachdiplom autoriza el acceso a universidades en Alemania, tanto para pre- como postgrado. Además hay universidades a nivel nacional que otorgan becas por la aprobación del Sprachdiplom II. Cada prueba se divide en cuatro áreas: dos productivas (oral y escrita) y dos receptivas (lectora y comprensión de audio).